¿Cómo cerrar la brecha de financiamiento de mujeres emprendedoras?

¿Cómo cerrar la brecha de financiamiento de mujeres emprendedoras?

Finanzas con enfoque de género General

La brecha de financiación para mujeres emprendedoras en el mundo es de 1,7 billones de dólares, según el Foro Económico Mundial.

Las mujeres emprendedoras constituyen una parte importante del panorama de las MiPymes, pero siguen estando no bancarizadas.

Violeta Pacheco Mejía es emprendedora y propietaria de Tejidos Peruanos, una empresa de ropa ecológica de alpaca y algodón con sede en Lima (Perú). En los últimos 18 años ha ampliado su negocio, abriendo una próspera fábrica que emplea a 14 mujeres y exporta productos a más de seis países. Sin embargo, cada una de las inversiones para su creciente negocio, incluida la compra de un edificio, la contratación de empleados y la adquisición de más materias primas y equipos, se financió a través de un préstamo que su marido recibió del banco. Como mujer, Violeta no podía acceder a un préstamo por sí misma.

Como ella, muchas mujeres de todo el mundo no tienen las mismas oportunidades que los hombres; se calcula que la brecha total de financiación de las microempresas y las pequeñas y medianas empresas (MiPymes) para las mujeres asciende a 1,7 billones de dólares. Sin embargo, las mujeres emprendedoras poseen el 22% de las microempresas y el 32% de las pymes. En términos más generales, 740 millones de mujeres en todo el mundo carecen de servicios bancarios, según la base de datos 2021 del Banco Mundial, y 2400 millones de mujeres en todo el mundo carecen de los mismos derechos económicos que los hombres. A menos que nos esforcemos conscientemente por incluir a las mujeres, las intervenciones financieras no dan en el blanco.

¿Cómo se puede cerrar esta brecha?

Las mujeres necesitan soluciones a su medida. Según el informe 2021 del Banco Mundial, las mujeres están excluidas de la banca formal por carecer de formas oficiales de identificación, acceso a dispositivos móviles, y normas y estructuras informales y formales, que limitan su capacidad financiera. Reducir estas brechas implica un diseño centrado en la mujer que resuelva problemas reales de las usuarias y las ponga en contacto con el producto adecuado.

  • Las alternativas al sistema financiero formal, como los grupos de ahorro, son una solución en la que las formas oficiales de identificación son innecesarias. Esto es especialmente importante para las mujeres de zonas rurales de difícil acceso.
  • Una micro, pequeña o mediana empresa (mipyme) estacional puede necesitar un préstamo bancario con amortización flexible, para que la propietaria pueda devolver el préstamo según sus condiciones.
  • Los bancos deberían reducir los requisitos en materia de garantías y coavalistas de los préstamos para eliminar las barreras que limitan el acceso de las mujeres a productos financieros.
  • Para garantizar el éxito empresarial a largo plazo de las mujeres, los proveedores de servicios financieros deberían ofrecer formación en habilidades financieras y gestión empresarial.

Existen numerosas soluciones si centramos a las mujeres en el proceso de diseño.

Muchos proveedores de servicios financieros diseñan falsamente productos financieros “neutros en cuanto al género”, o sea, destinados tanto a hombres como a mujeres, aunque a menudo se diseñan pensando principalmente en las necesidades de los hombres.

 

Los estudios de mercado demuestran que las mujeres tienen necesidades diferentes a la hora de decidirse por un nuevo producto o servicio financiero. Las emprendedoras han dicho que necesitan tener acceso a préstamos del tamaño adecuado; flexibilidad en cuanto al historial crediticio; que no se tengan en cuenta las deudas de sus maridos; opciones de reembolso flexibles; préstamos más cortos y estacionales; la posibilidad de cubrir gastos médicos como la atención preventiva; y que los bancos contraten a más agentes de crédito mujeres.

La igualdad de representación de género en las empresas y la eliminación de la discriminación hacia las mujeres trabajadoras y directivas pueden aumentar la rentabilidad y la productividad. Las pymes dirigidas por mujeres obtienen buenos resultados de los bancos. Y está demostrado desde hace tiempo que, dado que las mujeres son más propensas que los hombres a gastar recursos en mantener a sus familias y comunidades, un aumento de los ingresos de las mujeres tiene un impacto en cascada sobre el bienestar de los hogares, las comunidades y las economías.

 

Tomado de: https://es.weforum.org/agenda/2023/11/el-deficit-de-financiacion-de-mujeres-empresarias-es-de-us-1-7-billones-he-aqui-como-cerrarlo/#:~:text=La%20brecha%20de%20financiaci%C3%B3n%20para,podr%C3%ADamos%20cerrarla%20%7C%20Foro%20Econ%C3%B3mico%20Mundial

 

Las mujeres se plantean metas familiares

Las mujeres se plantean metas familiares

General Planificación y Presupuesto

Autora: Lourdes Hernández

 

Por el mismo hecho que las mujeres están involucradas en el cuidado de los niños, en la alimentación y la vestimenta, su tendencia a la hora de planear metas anuales es familiar.

Su principal objetivo es combinar su rol de madre con el de profesional. Para ellas, un verdadero lujo es tener tiempo libre para dedicarlo a sus hijos.

Por otro lado, estudios indican que, en términos de salud, la mujer piensa en sus hijos antes que en ella.

Para ello presentamos tres ideas:

  1. Recupera algo del tiempo perdido y dedícalo a tus hijos:

Es fácil distraernos en el celular, en la televisión, o con amigas y colegas, en lugar de dedicar esas horas a nuestros hijos. Este esfuerzo nos dará paz mental y pronto veremos buenos resultados en su actitud y formación.

  1. Invierte el tiempo libre en actividades de calidad para ti:

Guarda dos horas diarias para invertirlas en ti. Ya sea para deporte, para leer, salir a dar un paseo, meditar, ir con amigas y amigos o ayudar a otras personas. Este autocuidado beneficiará a la familia pues tendremos más paciencia, serenidad y empatía.

  1. Dedica un día al mes para tu salud:

Obtén citas para acudir al ginecólogo, al dentista, al psicólogo, a los exámenes médicos anuales, etcétera. Nuestros hijos tendrán una mamá saludable por largo tiempo.

Desafortunadamente hay preocupaciones más graves entre la mayoría de madres de Latinoamérica. El acceso a educación y que ésta sea de buena calidad; acceso a salud y asistencia médica para la familia en cualquier circunstancia; obtener un mejor salario para las necesidades del hogar; y finalmente y más difìcil, el evitar la violencia intradoméstica.

Para este último punto, es necesario plantearse las siguientes metas:

  1. Informarse de todos los aspectos que llevan a la violencia intrafamiliar.
  2. Generar un ambiente de respeto en la casa, entre la pareja y hacia los hijos.
  3. No permitir la mínima muestra de violencia. Si se da, impedir que se repita y si es del caso, presentar una denuncia de agresión física o psicológica.
  4. Si se “ha normalizado” la violencia en tu familia, es momento de poner un alto a ésta presentando una denuncia y alejándote tú y tus hijos del agresor.

 

Que la meta principal del nuevo año sea proteger nuestra familia comenzando por nosotras mismas.

 

Fuente: unicef.org

Reflexiones sobre género y finanzas

Reflexiones sobre género y finanzas

General

Autora: Ana María Velasco

Hoy en día las mujeres están desafiando los roles tradicionales de género. Ya no esperamos ni dependemos de que el novio o un hombre nos pague las salidas. Ahora las mujeres tomamos las riendas de nuestra propia vida; nos lanzamos a viajar solas, salir solas, y hasta tener un departamento solas. Pero además de ser dueñas de nuestras decisiones, las mujeres somos económicamente independientes.

Actualmente, las chicas jóvenes estamos enfrentando nuestros desafíos económicos con determinación. Sea que se trate de préstamos estudiantiles, gastos inesperados o decisiones de inversión, asumimos la responsabilidad y buscamos soluciones sin depender de otros.

La independencia económica no solo se trata de números en una cuenta bancaria; es la habilidad de tomar decisiones informadas y conscientes sobre nuestras finanzas. A través de la educación financiera, las mujeres jóvenes adquirimos las habilidades necesarias para tomar decisiones informadas, invertir con sabiduría y construir un futuro financiero sólido.

Las mujeres no solo están participando en ámbitos laborales profesionales, sino que están liderando el camino. Más mujeres van a la universidad, negocian sus sueldos y están comprometidas en la lucha por la igualdad salarial. Además, muchas están emprendiendo con éxito, identificando oportunidades y construyendo sus propios negocios.

Lo más inspirador es que no estamos solas en este viaje. Actualmente, existen numerosas redes de mujeres donde nos apoyamos mutuamente. Conectar con otras mujeres exitosas en diversos campos proporciona conocimientos, apoyo y oportunidades. La sororidad está creando un entorno positivo que empodera a todas las mujeres.

Dicho esto, si eres una chica joven y sientes que no eres económicamente independiente, este es el momento para dar el primer paso. No importa en qué etapa te encuentres, ya sea enfrentando deudas estudiantiles o dando tus primeros pasos en el mundo laboral, cada pequeño paso cuenta. La independencia financiera es un viaje, y cada esfuerzo que hagas te acerca más a la libertad económica y a la capacidad de dirigir tu propio destino.

La independencia económica es el nuevo superpoder secreto que permite a las mujeres hoy en día crear sus propios destinos y alcanzar sus metas. Por eso te invito a que, si eres una mujer, no subestimes tu capacidad para tomar decisiones informadas y valientes. Ya sea en la búsqueda de educación financiera, negociando en el lugar de trabajo o emprendiendo tu propio camino, cada elección que hagas es un paso hacia tu independencia económica. ¡Las mujeres somos las protagonistas de nuestra propia historia financiera!

 

 

La brecha de género y la Premio Nobel de Economía

La brecha de género y la Premio Nobel de Economía

General

Autora: Lourdes Hernández

Siempre he pensado que, si no me pagan más, no es porque soy mujer, sino porque tengo que demostrar méritos. 

Los méritos son: más productividad, más estudios, mejores resultados.

Claudia Goldin, la nueva Premio Nobel de Economía, dice exactamente eso y algo más. Esta académica de Harvard, graduada en Cornell y con un doctorado en la Universidad de Chicago basa su investigación en las complejas dinámicas que impulsan las diferencias salariales entre hombres y mujeres.

Claudia demuestra que la brecha de salarios no es necesariamente por género sino por educación, perspectivas culturales, normativas. Además, propone soluciones concretas. 

Dice que la flexibilidad laboral ayuda a las mujeres pues cuando ellas tratan de equilibrar su vida laboral con la familiar, reciben penalización y ese uno de los factores que mantiene su salario a la baja. 

Las mujeres quieren trabajar, están dispuestas a trabajar, o están trabajando. La tasa laboral de hombres y mujeres es igual. ¿Entonces por qué hay la brecha si son tan similares?

La mujer prefiere que no le suban el salario pero que le permitan ausentarse del trabajo parcialmente para atender las necesidades de sus hijos y del hogar. 

Según la Premio Nobel, las mujeres en la actualidad trabajan desde jóvenes y permanecen en el mercado laboral hasta su jubilación, tienen carreras profesionales lo cual es significativo pues alargan sus expectativas laborales. 

Es habitual que una mujer de 60 años siga trabajando y eso ven las más jóvenes. Además, ellas esperan tener cada vez mejores salarios.  Aspiran a más formación, a más crecimiento, a hacer carrera profesional dentro de la empresa. Las mujeres entran de manera normal a la universidad con la intención de extender su trabajo por muchos años. 

El salario por hora de las mujeres en 1960 equivalía al 60% de un hombre.

Ahora el salario por hora equivale al 80% de un hombre. ¿Por qué sigue este diferencial?

No es discriminación, dice Claudia, sino que, si se mide educación, nivel de responsabilidad, tamaño de la empresa, etcétera, la brecha se reduce a una mínima expresión: el 95%.

Esta micro diferencia no es por el hecho de ser mujeres. 

Claudia dice que la razón es que las mujeres prefieren una mayor flexibilidad laboral que los hombres. El reparto de la carga del trabajo del hogar sigue recayendo de manera más intensiva sobre ellas. El nacimiento del primer hijo es determinante para el trabajo de la mujer. Ellas toman elecciones que penalizan el salario que deben recibir. 

La hora trabajada tiene menor productividad en una jornada a medio tiempo. En cambio, tiene mayor productividad la hora trabajada en una jornada completa.

Si las empresas descubren formas de reorganizarse internamente de forma natural -no a través de leyes- para que la flexibilización no merme la productividad de los trabajadores, la brecha de género tenderá a desaparecer. 

 

Fuentes: Juan Ramón Rallo, Her Global Impact

 

Mujeres crean un proyecto comunitario sostenible

Mujeres crean un proyecto comunitario sostenible

Emprendimiento General

Autora: Lourdes Hernández

Cuando a Julie Milne, fundadora de The ReMakery, le preguntaron si su proyecto tiene un enfoque de diversidad, ella respondió así:

“No importa quien participa y a quién se beneficia. Hay familias enteras que viven en un garaje y nosotros no les preguntamos por qué viven así y qué piensan hacer. Solo les invitamos a comer una comida caliente de productos orgánicos y locales”.

Según ella, The Remakery es crear gozo y magia.

¿Cómo comenzó su trabajo comunitario?

Julie tuvo un diagnóstico temprano de cáncer, y mientras estaba en su tratamiento, la directora de una escuela le invitó a sembrar una huerta allí, con los alumnos.

Le dijo: “no te puedes morir hasta que no termines la huerta”.

Fue el principio de varias huertas por toda la localidad, en los patios traseros de las casas, en espacios cedidos por la municipalidad, y finalmente, en una prisión cercana.

En la actualidad, la producción es tan grande que no solo abastece a las familias y prisioneros, sino que sirve para entregar a personas de escasos recursos. Para complementar el proyecto, Julie y su equipo de mujeres han contratado un chef (el hijo de Julie) para cocinar almuerzos que se entregan a diario a familias con niños y jóvenes que no tiene buena alimentación debido a la situación económica de sus padres.

Para quienes quieren formar una comunidad de ayuda humanitaria en su barrio, Julie resume los siguientes pasos:

  1. Sembrar una huerta en el patio trasero de tu casa.
  2. Continuar con varias huertas en terrenos de la localidad, sean jardines privados o espacios públicos.
  3. Apoyarse con especialistas en permacultura para tener una buena producción.
  4. Pedir recursos a la municipalidad o a una ONG interesada en formar parte del proyecto.
  5. Encontrar la población beneficiaria cerca del barrio e involucrarla en el trabajo de las huertas.
  6. Repartir la cosecha para las familias productoras, y entregar el resto a los beneficiarios.
  7. Tener un lugar para reuniones en el que se ofrezca café y agua aromática sin costo (¡esta es la principal recomendación de The Makery!)
  8. Encontrar oportunidades para crecer: tener una cocina para preparar alimentos para la población beneficiaria. Un ropero para reparar y/o donar vestuario. Una mecánica de reparación de bicicletas. Un espacio para cuidar niños vulnerables en las tardes. Otros.
  9. Mantener el proyecto en el largo plazo con apoyo de los hijos y nietos.

Fuente: documental Together we grow (Juntos crecemos) de Happen Films

Trabajos cotizados, no remunerados

Trabajos cotizados, no remunerados

Finanzas con enfoque de género General

Autora: Lourdes Hernández

Las Naciones Unidas estima que el total de cuidados de niños, no pagados a mujeres, es de US$3.2 trillones en 2012.

En 2014, se registraron 18 billones de horas no pagadas de cuidado de pacientes con Alzheimer por parte de miembros de la familia.

En México, en 2015, el trabajo doméstico y cuidado de niños y ancianos se valoró en 21% entre las actividades productivas, lo cual es más alto que la manufactura, comercio, corretaje, minería, construcción y transporte.

Estos trabajos de alta responsabilidad y que demandan mucho esfuerzo, son una oportunidad para las mujeres.

Las opciones son:

  • Negociar con el esposo o con los familiares, un valor monetario por el trabajo por hora del cuidado de los hijos, sobrinos, nietos o adultos mayores. Si estos últimos cuentan con un fondo de jubilación, deberán pagar por su cuidado.
  • Recibir capacitación de auxiliar de enfermería, primeros auxilios, cuidado de bebés, y ofrecer sus servicios en el mercado.
  • Emprender una guardería o un centro de cuidado del adulto mayor. Otras opciones alrededor de esta área son: transporte a estas personas, entrega de alimentos adecuados, terapia recreativa, cuidado personal.

Con nuevos ingresos, ya sean fijos o variables, se aplican las fortalezas financieras de la mujer, que incluyen:

  • El ahorro monetario o no monetario;
  • La prudencia ante ofertas de inversión no tradicional;
  • La constancia para invertir en los hijos.

Sus finanzas entran en un círculo virtuoso que reduce su nivel de riesgo y su vulnerabilidad.

Con seguimiento y disciplina, prioriza gastos y mejora el manejo de liquidez. Empieza a invertir.

Tener un trabajo remunerado le da disciplina, autonomía económica, mejora sus relaciones y aumenta su autoestima. Todo esto transmite a sus hijos.

Aumenta su poder de negociación frente a otros negocios y trabajos remunerado y no remunerados.

Los cambios positivos en su economía redundan en sus tiempos libres, en los que elige actividades que benefician su salud, por ejemplo, invertir en un gimnasio.

Otros beneficios que llegan en cadena son: mejor salud, alimentación y educación para ella y los miembros del hogar.

Más allá de reclamar por los años de trabajo sin un reconocimiento, es momento de sacar adelante la creatividad y obtener una tarifa justa por los servicios que se prestan.

Fuente: finanzaspopulares.gob.ec

Inclusión financiera a mujeres impulsada por mujeres

Inclusión financiera a mujeres impulsada por mujeres

Finanzas con enfoque de género General

Autora: Lourdes Hernández

Mujeres con mirada femenina creando productos y servicios financieros para mujeres es una frase con mucho sentido.

Si las instituciones financieras impulsan a sus ejecutivas a alcanzar cargos con poder de decisión, no es para que ellas piensen como hombres. Ni es para mejorar el indicador de mujeres en cargos directivos.

Es para que desarrollen acciones, productos, servicios con identidad femenina. Es dejar que la mujer piense como mujer, con todas las características que la diferencian de la identidad masculina.

Aquí algunos indicadores:

Más del 57% de las mujeres en Ecuador tiene una cuenta bancaria. Los hombres alcanzan un 64% (Global Findex 2014).

Las mujeres de menos recursos económicos tienen un 28% menos de probabilidad de tener cuenta bancaria que los hombres en la misma situación económica.

Actividades en las que trabajan las mujeres: 37% agricultura, 34% comercio, 13% industria manufacturera, 16% otras.

¿Cómo desarrollar productos enfocados a la mujer, sobre todo a las campesinas y a las mujeres indígenas?

Lanzamos algunas ideas:

  1. Realizar visitas puerta a puerta para conocer la necesidad de las mujeres para apertura de cuentas, de ahorro, crédito y seguros.
  2. Impartir clases de educación financiera para mujeres.
  3. Realizar un acompañamiento para buen manejo del crédito a las clientes mujeres, no solo del asesor de crédito, sino de clientes mujeres líderes, que conocen y dominan los productos y servicios.
  4. Impulsar a realizar depósitos, retiros, otras transacciones, de manera digital, evitando la pérdida de dinero por consumo excesivo, por robo, etc.
  5. Reforzar el concepto del ahorro monetario digital en las mujeres, las cuales de naturaleza son ahorradoras.
  6. Dar voz a las mujeres y escucharlas; reforzar su espacio en el hogar, negocio, comunidad y gestión local.
  7. Impulsar a tener sueños propios individuales, para su familia o para el negocio, y no aquellos que las tendencias o los hombres proponen.
  8. Reducir la vulnerabilidad de las mujeres en salud, violencia, quiebra, robo, hiperconsumo a través de seguros, de orden en las finanzas, de derechos humanos, de autocontrol.

Toda acción a favor de las mujeres da como resultado disciplina, autonomía económica, aumento de autoestima, mejora de relaciones; lo que a su vez se transmite a sus hijos.

Toda mejora en ellas reduce la pobreza familiar.

¿Quién más puede saber de estas necesidades sino las mismas mujeres?

Fuente: finanzaspopulares.gob.ec